Si tienes que preguntarte,
o preguntarme,
si lo que sientes por mí
es amor de verdad,
entonces, créeme, no lo es.
Porque el amor de verdad
se siente muy adentro del alma
y con una gran certeza.
No hay espacios para dudas,
segundas opiniones,
ni terceras personas.
Se siente con la urgencia
de querer vivir juntos
por siempre;
con la seguridad de no
necesitar buscar
en ningún otro lugar.
Se vive con el deseo
de tomar tanto lo bueno,
como lo malo,
de la persona amada.
Pero si tú
solo estás lista
para “amarme” en mis días soleados
o si necesitas algún tipo de certificado
para estar segura de que me amas,
es mejor que pasemos página
y nos olvidemos de lo que alguna vez fuimos.
Leave a Reply